24/7 CUARENTENA Y MADRE

24/7 CUARENTENA Y MADRE

El 12 de Marzo entré con mis hijos de la mano a mi casa, los senté y les dije que que no iban a ir al colegio en unos días porque había un bichito en la calle que hacía que las personas se pusieran muy malitas y el colegio iba a cerrar para que el bicho no nos encontrara. 
Han pasado más de 2 meses de aquello y aquí seguimos.
Estamos más unidos que nunca, pero claro, tampoco tenemos otra opción, ya que estamos 24 horas, 7 días a la semana juntos. 
Papá va y viene del trabajo, es de los que ha tenido suerte y conserva su trabajo, pero mamá también lo conserva sí, vaya que sí lo conservo, un ERE maternal es lo que ya empezamos a necesitar algunas.
Cuando somos madres, lo somos a tiempo completo, de eso no hay duda, pero, ahora?
Una jornada laboral son 8 horas máximo, 40 horas semanales, al final, siempre libres un día, pero en la maternidad coronavírica?
Mis hijos se han convertido ya en parte de mi cuerpo, son ya como las canas, los pelos de las piernas, son secuelas del confinamiento. 
Cada día, nuestras mentes se empiezan a amoldar más  a las nuevas situaciones y hacemos más llevaderas las rabietas, las horas y horas de deberes  e incluso suenan más flojo los "tonto, no, tonto tu" 
Pero otra veces, la ansiedad maternal nos invade, nos posee como el agua a una catarata y ahí es donde tenemos que tirar del hilo de la necesidad. 
Las madres tendemos a vernos en un segundo plano, y no tiene porque ser así, acaso nosotras somos de hierro, de madera, de barro? 
No pequeñas mías, no dejemos que este maldito virus nos trate como si fuéramos un caballito de madera de niños de esos que balanceas hacia adelante o hacia atrás y que si chirría al moverlo le echas aceite y vuelve a funcionar. 
Si me encierro en el baño y digo que me estoy depilando pero  estoy enganchada al móvil viendo memes,no pasa nada, es mi ratito. 
Si me pongo el despertador para desayunar sola o con mi marido pero intento que el silencio sea sepulcral para que no se levanten los niños y tenga que hacerles la leche,no pasa nada, es mi ratito.Si les digo a mis hijos que estén callados que estoy escuchando un audio de mi madre cuando en realidad estoy escuchando un audio de una amiga contándome que está hasta el moño de estar en casa y la peli de risa que vio el día anterior,no pasa nada, es mi ratito. 
Porque la cuarentena se convirtió en sesentena, porque el desgaste emocional hace mella, porque nosotras también somos de carne y hueso y porque desde que todo esto empezó, estamos pegadas a nuestros hijos como las moscas a la mierda 24/7.
Y sí señoras, levantemos la mirada, pongamos la música y bailemos al son de nuestra alma, porque somos guerreras, somos una tribu, y somos mejores que el equipo A, somos, las 24/7 en cuarentena. 💪😜. 
            
           La mamá del incienso