Hace algún tiempo,la vida me quitó un tesoro que tenía en casa,mi padre,se fué de repente,sin dejarnos asimilarlo,sin darnos tiempo a pensar,simplemente,se fué.
Al cabo de los años fuí madre por primera vez,y desde el minuto uno, era como si nunca se hubiera ido.En el quirófano mientras me hacían la cesárea sé que ahí estaba,cuando la matrona sacó a mi bebé para que lo conociera mi familia,sé que ahí estaba,cuando le cambié su primer pañal sé que ahí estaba,en su primer baño en casa,sé que también estaba.
Nació mi segundo hijo,y seguía estando en todos esos momentos,mientras estuvo ingresado al nacer porque fue prematuro,en sus primeros pasos ,cuando comió sólido por primera vez...él, siempre estaba.
Estaba porque yo siempre lo tuve y tengo presente,porque mis hijos solo han conocido a sus abuelas pero a ningún abuelo,mo saben lo que es jugar con su abuelo, no saben lo que es que su abuelo los lleve al parque o les compre un juguete,pero yo me encargué y me encargaré siempre de que lo sientan como hasta día de hoy lo sienten.
Mis hijos hablan de sus abuelos como si estuvieran en casa viendo la tele,mis hijos saben cosas de sus abuelos que quizá si estuvieran vivos ni sabrían, porque cuando estamos vivos ,no le damos importancia a cosas que cuando alguien se va se le da.
Recuerdo pedirle opinión a mi padre sobre que zapato me quedaba mejor con la ropa que llevaba,en aquel entonces,para mi siemplemente le estaba haciendo una sencilla pregunta a mi padre,pero hoy lo recuerdo como algo tan bonito ♥️.
Los niños no pueden recordar lo que no han vivido,pero TÚ,como madre o como padre,puedes hacer que lo vivan en su mente,puedes hacerle sentir que sí tienen a su abuelo aunque físicamente ya no esté.
En mi casa se habla de él como uno más ,como si mañana viniera a comer a casa,como si el mismo le hubiera escrito la carta a los Reyes Magos para sus nietos.
Sé, que el día de mañana,cuando mis hijos sean adultos me van a agradecer todo lo que les hablo de sus abuelos.
Creo que el ser invisible, no te hace no estar presente.
La familia es un puzzle,y si falta una pieza no pasa nada,nos la imaginamos.
Por eso,hablarle a los niños de sus seres queridos ya fallecidos es muy importante,ayudarle y ponerle más fácil la colocación de la ficha del puzzle que falta.
Como bien leía esta mañana gracias a Madresfera,cumplamos la tarea de vivir,de tal modo que cuando muramos hasta el de la funeraria lo sienta.
Tener siempre presentes a nuestros seres queridos,hablemosle a los niños,contémosles anécdotas, historias divertidas, como eran,cuales eran sus gustos sus virtudes y porque no también sus defectos,pero hablemos mucho de ellos siempre,porque si le hablas siempre,siempre estará.♥️
La mamá del incienso
