Que bajita soy, me gustaría tener el pelo liso.
Mi amiga dice que porfavor le acompañe,tengo que hacerlo si o si.
Jo!! Esque tengo las piernas gordas.
¿Bikini yo? No que tengo barriga.
Soy muy impulsiva tengo que frenarme más.
Mierda, y ahora con gafas.
Hablo mucho, tengo que aprender a no hablar tanto.
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Podríamos hacer una lista tremendamente larga de todas las cosas que nos decimos a nosotras mismas.
Los "defectos" que tenemos no nos dejan vivir.
Complejos, detalles absurdos y condiciones varias que nos hacen ver una realidad disfrazada.
Disfrazada de fantasmas, de monstruos feos, de supuestos errores cometidos.
Hacer ejercicio, subirme a la elíptica, hacer abdominales, teñirme el pelo o salir corriendo si alguien te lo pide son cosas que equivocadamente creemos que nos hacen sentirnos mejor.
Nadie está al 100x100 contenta con su personalidad, con su físico, con su manera de hacer las cosas.
Pero creemos que un tinte o un voy a estar callada y no hablar tanto nos hace mejores personas o nos va a hacer sentirnos maravillosas.
Porsupuesto, una tiene que verse bien, sentirse bella, sentirse querida, pero nunca es suficiente, siempre queremos más.
Queremos que la gente nos adore, que hablen maravillas de nosotras.
Queremos que nos digan lo guapas que estamos con nuestro nuevo look, lo bien que nos sienta las gafas nuevas, los kilos perdidos...
Pero para todo ello se necesita dar el primer paso.
Nunca me ha gustado la frase de
-Esque yo soy así
Creo que toda persona humana puede y debe mejorar ciertos aspectos de si misma.
Pero hay una personalidad básica o un perfil físico mínimo que no sólo no se puede cambiar, sino que no hay porque hacerlo.
Yo soy bajita, y es lo que hay, no lo puedo cambiar.
Yo soy muy dicharachera, y habrá gente que no le guste como soy, pero no lo puedo cambiar.
Nos pasamos la vida intentando hacer esos cambios, ser la persona que creemos que todo el mundo quiere que seamos. Pero...
Y tú?
¿Realmente quieres tú cambiar?
¿Enserio no te gustas a ti misma?
¿O quizá no te has parado nunca a enamorarte de ti?
Si tu te quieres tal y como eres, la gente te va a querer, si tu confías en ti misma, la gente también lo hará.
Si tu te levantas con seguridad, darás los primeros pasos del día firmes.
Es difícil aprender a querernos tal y como somos, es mucho más fácil culpar a los demás, sentir que tienes cosas que cambiar por los demás, eso es lo fácil, lo sencillo, pero no es lo mejor para ti.
Tu vales por tu forma de ser.
Eres preciosa con tus orejas grandes o pequeñas.
Eres preciosa con tus kilos de más o de menos.
Eres preciosa con tu voz que tanto odias o con tu voz de pito
Eres preciosa con tu personalidad alegre o tu personalidad sería.
Eres preciosa con tu nerviosismo o con tu paz y armonía.
Eres preciosa siendo una llorona o siendo una persona que no expresa sus sentimientos.
Eres preciosa con tu pelo rizado, con tu pelo liso,y que carajo... Y si no tienes pelo, sigues siendo preciosa.
Somos lo más bonito de la tierra, nacemos sin pedirlo y venimos a este mundo como nos toca a cada una.
Y nuestro egoísmo en lugar de agradecer, nos hace pasarnos toda una vida, intentando cambiar lo que traíamos ya de serie.
Quiérete, acéptate, háblate...
Mirate y dí a tu yo lo maravillosa persona que eres con tus virtudes y tus defectos.
Porque no hay mayor defecto que no sentir que nosotras lo valemos.
Di a tu yo cada día :
-Soy como soy, porque yo lo valgo.
La mamá del incienso
